M.angeles García Montero
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Somos los dueños de LOLA, y hace días que queremos encontrar la manera perfecta de expresar lo agradecidos que estamos con vosotros. Sin embargo, nos hemos dado cuenta de que ninguna acción o regalo estaría a la altura de lo que realmente merecéis. Por eso, hemos decidido escribir estas palabras desde lo más profundo de nuestro corazón, para que quienes os visiten puedan conocer la calidad humana y profesional que define a vuestro equipo.
LOLA llegó a vuestra clínica muy malita, tanto que llegamos a plantearnos lo impensable: despedirnos de ella a pesar de tener solo tres añitos. Sin embargo, gracias a vuestro increíble trabajo y dedicación, sigue luchando y continúa bajo vuestros cuidados. No tenemos palabras que puedan abarcar el sentimiento de gratitud y admiración que sentimos hacia cada un@ de vosotr@s, pero sí un sinfín de adjetivos para describir vuestra labor: cariño, amabilidad, sinceridad, EMPATÍA, profesionalidad y una humanidad indescriptible.
Desde el primer momento habéis tratado a LOLA como si fuera vuestra propia mascota. Vuestra entrega y pasión son palpables en cada gesto, en cada sonrisa, en cada decisión. Habéis sido un pilar de apoyo no solo para ella, sino también para nosotros como familia. Saber que está en manos tan maravillosas nos da consuelo en este camino tan difícil.
Lamentablemente, he leído algunas reseñas negativas sobre vuestra clínica y no puedo entender cómo alguien podría expresar algo así tras conocer vuestra dedicación. Nosotros, que estamos pasando muchos días a vuestro lado, hemos sido testigos del esfuerzo titánico que realizáis, incluso en las circunstancias más complicadas. Lo que hacéis no es fácil, pero lo hacéis con una entrega y un amor que marcan la diferencia.
Por nuestra parte, solo nos queda deciros: gracias, gracias y mil veces gracias. Pase lo que pase con nuestra querida LOLA, siempre os llevaremos en el corazón. Sentíos orgullosos de lo que sois y del impacto tan positivo que tenéis en la vida de los animales y sus familias. Vuestro trabajo es un regalo que nunca olvidaremos.
Gracias infinitas por todo lo que hacéis cada día.
