Tortugas.. ¿Preparadas para la hibernación?

Es importante asegurar el correcto estado de salud y realizar un examen parasitario de las heces aproximadamente un mes antes del inicio de la hibernación.

Riesgos de la hibernación de las tortugas 

La hibernación supone una disminución de las funciones vitales de las tortugas: del metabolismo, de la digestión o del sistema inmunitario. Por este motivo:

• Es importante que se encuentren en un estado de salud adecuado antes de entrar en ella, ya que la enfermedad puede empeorar durante la hibernación.
• Es importante que no tengan alimento en el intestino, ya que puede fermentar cuando la digestión se para. Los baños diarios antes de comenzar la hibernación ayudan a eliminar el contenido del intestino.
• Las tortugas pueden despertarse durante la hibernación en los días calurosos. En estos casos se les puede ofrecer agua, pero no se les debe ofrecer comida.
• La deshidratación es otra complicación asociada a la hibernación, y en algunos casos puede producir problemas graves como la insuficiencia renal o la gota incluso semanas después de despertarse. Realizar baños antes y después de la hibernación (ver cuadro más abajo) permiten minimizar este problema. 

¿Cómo se hace hibernar a una tortuga?

Generalmente las tortugas se entierran en tierra o buscan un escondite discreto. Se recomienda que el sitio en que va a hibernar esté resguardado de la lluvia o tenga un buen drenaje para evitar ahogamientos; también debe estar protegido de animales silvestres como las ratas. Si no la vamos a dejar enterrada en el suelo, una vez ha empezado la hibernación, la podemos manipular y colocar en otro sitio que esté más resguardado, pero siempre a la temperatura del exterior, para no interrumpir la hibernación.  

¿Y si no queremos que hibernen?

Si las tortugas son muy jóvenes, pertenecen a especies que no hibernan (como, por ejemplo, las tortugas africanas), presentan alguna enfermedad, o bien decidimos que no hibernen, es necesario montar un terrario dentro de casa en el que proporcionemos el rango de temperatura adeucado para la especie. 

¿Las tortugas acuáticas tienen que hibernar?

La mayoría de las tortugas semiacuáticas que se mantienen con mascotas provienen de zonas cálidas donde no es necesaria la hibernación. Algunas de estas especies, sin embargo, se han adaptado a vivir a un clima más frío y pueden pasar por un periodo de inactivación similar a la hibernación cuando bajan las temperaturas.  
 

¿Qué hay que hacer si tienes una tortuga?

Antes de la hibernación (finales de septiembre, octubre)

• Visita al veterinario, aportando una muestra de heces lo más frescas posible, por si hay que desparasitar. En esta visita y según el estado de salud de la tortuga se decidirá si se la hace hibernar o no
• A medida que la tortuga va dejando de comer, hacer baños de agua tibia, de unos 20 minutos de duración y con un nivel de agua que llegue a la base de la cola pero no a la cabeza
• Ofrecer un sitio para esconderse o controlar el sitio donde habitualmente se entierra o se esconde la tortuga

Durante la hibernación

• Controlar que si se despierta tenga acceso a agua limpia
• Controlar el peso (no deben perder más de un 10 % de su peso en total)

Al despertarse (marzo, abril)

• Hacer baños de agua tibia dos veces al día durante dos semanas o hasta que empiece a comer y a orinar. Después, una vez al día dos semanas más o hasta que muestre un comportamiento y actividad normales
• Hacer una visita posthivernación en el veterinario (opcional)