Dermatitis húmeda en perros: causas, síntomas y tratamiento

La enfermedad se caracteriza por la aparición de áreas de enrojecimiento, inflamación y humedad en la piel, principalmente en las patas y alrededor de la boca. Esta condición puede resultar molesta y dolorosa para los perros, por lo que es importante entender sus causas, síntomas y opciones de tratamiento.

Causas de dermatitis húmeda

La dermatitis húmeda en perros generalmente es causada por el lamido excesivo y constante de una zona específica de la piel. Algunas de las causas subyacentes más comunes incluyen:

Alergias: Las alergias a alimentos, ácaros del polvo, polen o productos químicos pueden desencadenar la dermatitis húmeda en perros. El rascado y lamido excesivos provocan irritación y humedad en la piel.

Infecciones cutáneas: Las infecciones bacterianas o fúngicas pueden provocar picazón intensa en los perros, lo que a su vez puede llevar a la dermatitis húmeda. Las bacterias y hongos presentes en la piel prosperan en ambientes cálidos y húmedos.

Factores ambientales: Las condiciones ambientales, como el calor, la humedad o la exposición a sustancias irritantes, pueden desencadenar el lamido compulsivo y, por lo tanto, contribuir al desarrollo de la dermatitis húmeda.
 

Síntomas de dermatitis húmeda

La dermatitis húmeda en perros se caracteriza por una serie de síntomas reconocibles:

Enrojecimiento y hinchazón: Las áreas afectadas de la piel pueden volverse rojas, inflamadas y sensibles al tacto.

Humedad y descarga: La piel afectada puede presentar un aspecto húmedo o incluso secreción de líquido, lo cual puede generar un olor desagradable.

Costras berosiones: El constante lamido y rascado pueden llevar a la formación de costras y erosiones en la piel afectada.

Prurito intenso: Los perros con dermatitis húmeda suelen experimentar picazón intensa, lo que puede llevar a un ciclo de lamido y rascado continuo.
 

El tratamiento de la dermatitis húmeda

El tratamiento de la dermatitis húmeda en perros se basa en abordar tanto la causa subyacente como los síntomas asociados. Aquí se presentan algunas medidas comunes utilizadas por los veterinarios:

Control de la causa subyacente: Identificar y abordar la causa subyacente de la dermatitis húmeda es fundamental. Si se trata de una alergia, se pueden realizar pruebas para determinar el alérgeno específico y se pueden recomendar cambios en la dieta o el entorno del perro.

Terapia tópica: Los baños medicados y los enjuagues tópicos con soluciones antimicrobianas o antiinflamatorias pueden ayudar a aliviar la irritación y promover la cicatrización de la piel. Los medicamentos tópicos pueden incluir cremas, lociones o sprays recetados por un veterinario.

Medicación oral: En casos más graves, se pueden recetar medicamentos orales, como corticosteroides o antihistamínicos, para reducir la inflamación y controlar el prurito.

Collares y conos de protección: Para evitar que el perro se lamida o rasque en exceso, se pueden usar collares o conos de protección especiales. Estos dispositivos evitan el acceso directo a las áreas afectadas y permiten que la piel se cure.

Es importante consultar a un veterinario para obtener un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento específico para cada caso de dermatitis húmeda. El veterinario realizará un examen físico completo, tomará en cuenta la historia clínica del perro y podrá recomendar las mejores opciones de tratamiento según las necesidades individuales.