- Dieta: El Westie necesita una dieta equilibrada y de alta calidad para mantener su energía y salud. Es importante que su comida tenga una proporción adecuada de proteínas, grasas y carbohidratos, adaptada a su tamaño y nivel de actividad. Dado que algunos Westies pueden ser propensos a alergias alimentarias, es útil evitar ingredientes comunes que pueden causar reacciones, como ciertos granos o proteínas específicas.
- Porciones: Se recomienda dividir su ración diaria en dos comidas para evitar el sobrepeso y problemas digestivos. La cantidad exacta dependerá de su edad, tamaño y nivel de actividad, por lo que es aconsejable consultar con el veterinario para ajustar su dieta.
Salud común del Westie
- Problemas de piel: Los Westies pueden ser propensos a alergias y problemas de piel, como dermatitis atópica, especialmente si no reciben el cuidado adecuado de su pelaje y piel. Es recomendable evitar el uso de productos químicos fuertes y cepillarlo regularmente.
- Problemas ortopédicos: Como muchas razas pequeñas, pueden presentar luxación de rótula y displasia de cadera, aunque en menor medida. Mantenerlo en un peso saludable y evitar ejercicios excesivos durante la etapa de cachorro puede ayudar a reducir estos problemas.
- Enfermedades hereditarias: Algunas enfermedades hereditarias que pueden afectar a los Westies incluyen el síndrome del Westie (fibrosis pulmonar) y la enfermedad de Addison. Aunque no son muy comunes, es importante realizar revisiones regulares con el veterinario para la detección temprana.
Actividades recomendadas para el Westie
- Ejercicio físico: Caminatas diarias y juegos como correr o lanzar pelotas son ideales para mantener a un Westie feliz y en forma. Disfrutan de actividades que les permitan explorar, ya que tienen un fuerte instinto cazador.
- Ejercicios de estimulación mental: Los juegos interactivos, como los rompecabezas para perros, y los juegos de olfato son excelentes para mantenerlos mentalmente estimulados. El adiestramiento en obediencia o trucos es otra forma de ocupar su mente y fortalecer el vínculo con su dueño.
El West Highland White Terrier es una excelente opción para familias y personas activas que buscan un perro pequeño pero enérgico, cariñoso y de personalidad fuerte. Su mantenimiento es moderado, especialmente debido a su pelaje, y requiere ejercicio y atención diaria. Este compañero leal y vivaz se adapta bien tanto a la vida en apartamentos como en casas con jardín, y disfruta de la compañía humana, convirtiéndose en un verdadero miembro de la familia cuando recibe el cariño y los cuidados adecuados.